Plaza Principal, c. 1828. Una de las imágenes más conocidas de la ciudad de Aguascalientes en el siglo XIX. Litografía de Carl Nebel.

En busca de la comprensión de la ciudad

La complejidad del fenómeno urbano es hoy un asunto de dimensiones infinitas. Los estudiosos comenzaron a interesarse seriamente en la ciudad hace apenas poco más de un siglo, cuando el crecimiento desmedido, la industrialización y toda una serie de fenómenos que esto trajo aparejado generaron conciencia de la historicidad de las urbes, de las similitudes y diferencias entre ellas, de sus cambios, y generaron la necesidad de estudiarlas, comprenderlas y tener diagnósticos y herramientas para su diseño. A pesar de que la figura de la ciudad está posicionada como uno de los emblemas de las grandes transformaciones del siglo XX, por muchas décadas su estudio fue campo casi exclusivo de urbanistas, arquitectos, geógrafos y sociólogos; los historiadores no consideraban que la ciudad mereciera un rango especial en sus trabajos, mientras los urbanistas o arquitectos ignoraban la historicidad de las urbes. Tan tarde como los años setentas, un geógrafo proponía como gran novedad “introducir la perspectiva histórica” en la caracterización de las ciudades. La relación entre la historia y el resto de las disciplinas que se interesan por los fenómenos urbanos se ha ampliado considerablemente, ha rendido frutos y actualmente está fuera de duda su pertinencia.Durante los últimos años, una de las preocupaciones académicas centrales del autor de este blog ha sido la de comprender la ciudad. En la búsqueda de respuestas a esta difícil pregunta propone caminos elementales, reducidos y acaso provincianos para ir reuniendo al menos reflexiones orientadoras, que parten de la investigación desde su formación de historiador a una ciudad media mexicana, Aguascalientes, y procuran extenderse, siguiendo líneas diversas y complementarias.La propuesta principal de esta página es difundir trabajos elaborados por el autor y que tienen como denominador común las preguntas de fondo que los guían: cómo es una ciudad, cómo crece, por qué, cómo funciona, cómo está integrada. Las disciplinas científicas, como la historia, no pueden generar resultados inmediatos; como en la investigación médica, que requiere largos años y un ejército de científicos para patentar una nueva fórmula, en la investigación de las ciencias sociales se requieren esfuerzos conjuntos y prolongados para obtener revisiones e interpretaciones imperfectas del mundo que nos rodea. El trabajo personal ha comenzado concentrándose casi de forma exclusiva en el análisis de la ciudad de Aguascalientes en los años del tránsito del siglo XIX al XX, aunque pretende apoyarse en miradores que nos permitan ver más allá de este campo espacial y temporal.

viernes, 18 de julio de 2008

¿Qué se oculta en Peñuelas? *

En las últimas semanas la discusión ha subido de tono y conviene reflexionar: ¿Qué sabemos y qué se oculta del Proyecto Estratégico Sur? Sabemos que fue presentado oficialmente en febrero de este año y conocemos las líneas generales de sus objetivos. Ciertamente desconocemos muchos detalles que, aunque importantes, son relativamente secundarios si comprendemos el fondo del proyecto, lo que se puede ver perfectamente con la información que circula, eso sí, de forma restringida. La primera crítica con sustento que se debe hacer es: ¿por qué se oculta información? ¿qué temor tienen los secretarios del Gobierno del Estado que no han querido comparecen ante el Congreso? ¿qué grave asunto oculta el gobernador Reynoso Femat cuando interpone una controversia constitucional para que sus muchachos no tengan que ir a dar la cara ante los diputados?
La verdad que hay respuestas sencillas en estos casos: los secretarios no hablan por dos razones, una porque tienen orden directa de su jefe de mantener total hermetismo, y otra porque en el fondo quizá tengan poco que decir. Los detalles que se conocen apuntan (y los que no se conocen apuntarán), de cualquier forma, a que lo que se esconde son los pocos beneficiarios directos del PES, a los efectos perversos que causará, y a que su razón fundadora es la especulación y la ganancia ilegítima. Insistimos, se deben conocer los pormenores, pero lo que existe ya muchos lo conocemos: proyecciones arquitectónicas y urbanísticas (renders) en softwares especializados que esbozan las ideas estilo Miami para hacer del casco de la exhacienda de Peñuelas un centro turístico y alrededor de ella crear un sinnúmero de desarrollos de vivienda, turismo, comercio, entretenimiento, industria y ampliación del aeropuerto. ¿Qué más habría que saber? Entre otras cosas, lo que valdría la pena conocer –aunque es más o menos obvio- es a quiénes pertenecen el grueso porcentaje de las tierras que están contempladas en el PES, quiénes serán los beneficiarios económicos del negocio, los capitalistas que invertirán en la construcción de la infraestructura, los servicios y las empresas que se instalarán. Además, y por principio de cuenta, hace falta una presentación puntual –sustentada- de los costos y beneficios del proyecto en cuestión.



Una versión de la propuesta de uso de suelo para el PES elaborada por el despacho Gómez Vázquez Aldana. Como se hace evidente, en unos cuantos años la presión de los desarrollos industriales, turísticos, comerciales y aeroportuarios generaría la expansión de la mancha urbana que alcanzaría una extensión cuatro veces mayor a la actual. Esta y todas las imágenes reproducidas aquí están tomadas de:


Un breve recuento de cinco meses. De la largamente prometida ciudad alterna a la apresurada ocurrencia del PES

Históricamente Aguascalientes ha sido una ciudad estado. Actualmente, alrededor del 80% de la población de toda la entidad se concentra en la ciudad, lo que centraliza las oportunidades, las decisiones y los recursos, al tiempo que genera una urbe que en su constante crecimiento multiplica sus problemas de empleo, seguridad y bienestar social en general.
Desde hace muchos años el discurso de los diferentes gobiernos subrayó la necesidad de crear una ciudad alterna al norte del estado. Nada menos, la actual administración del gobierno del estado, en voz del gobernador y de sus secretarios de obras públicas y desarrollo urbano, prometieron durante los primeros tres años que Rincón de Romos sería impulsada para convertirse en ciudad alterna. En noviembre de 2005, por ejemplo, el Secretario de Planeación y Desarrollo, Ricardo de Alba Obregón, aseguró por enésima vez “que durante la administración estatal en turno se sentarán las bases para la creación de al menos dos nuevas ciudades medias en la entidad, Rincón de Romos y Calvillo, y que estarán llamadas a absorber y equilibrar el crecimiento de la capital”.
Sorpresivamente, y en un golpe de timón que algunos atribuyen simplemente a “la locura del gobernador”, el 1 de noviembre de 2007 se informó escuetamente que el Gobierno del Estado había concluido el “Plan de Desarrollo a treinta años” que entonces se llamaba todavía Proyecto Puerta Dorada. Entre otras pocas cosas, se decía que estaba proyectado ocupar 21,500 hectáreas para su realización. Pasaron más de tres meses en los cuales la información fluyó con lentitud y hubo poco ruido, hasta que el 18 de febrero pasado se anunció formalmente que los planes habían cambiado, que ya no se fomentaría un polo de desarrollo en el norte o el poniente si no en el sur de la ciudad, en la zona de Peñuelas. ¿Por qué cambiaron las cosas intempestivamente? ¿Qué reacciones ha generado? ¿qué pasos en concreto han realizado defensores y opositores?
Quienes se han manifestado abiertamente en contra se pueden contar con los dedos de las manos: a nivel personal, pero con la fuerza que le otorga su prestigio, experiencia y posición dentro de su partido, Oscar López Velarde ha sido desde el principio la figura casi única que ha alzado la voz para exponer sus argumentos de desaprobación al PES. Junto a él, con algo de tibieza, algunas otras personalidades del Partido Revolucionario Institucional e incluso unos cuantos del Partido Verde Ecologista.
En cambio, aunque están lejos de formar un grupo representativo de la sociedad, son un número notoriamente mayor los que dicen sin empacho estar a favor del controvertido proyecto: el gobernador del estado, desde luego, su principal promotor, sus funcionarios de alto nivel, los diputados panistas en el Congreso local, otros miembros del blanquiazul, líderes empresariales y de profesionistas que seguramente tendrían participación en el negocio, etcétera. Sumisos, apáticos o francamente asustados, académicos y profesionistas que por sus conocimientos de formación o de relación saben de las implicaciones del proyecto prefieren la comodidad del silencio.
Entre los secretario de gobierno el más visible y controvertido ha sido hasta ahora Pedro Carneado García, el encargado de la política de vivienda en el estado, aquel que resultó seriamente comprometido en las desgracias que la lamentable falta de planeación y de escrúpulos provocaron en el fraccionamiento Valle de los Cactus y el Peralta Gámez, “razones” por cierto que le valieron al Gobierno del Estado recibir el Premio Nacional de Vivienda. El funcionario –que ha estado en el ojo del huracán en días recientes por haber llamado “ignorantes” a varios diputados priístas- ha acusado al ex alcalde Martín Orozco de haber eliminado la zona de Peñuelas del área contemplada para el crecimiento de la ciudad en el Plan de Desarrollo Urbano 20/30. Los desatinos verbales de Carneado y compañía han llegado al punto de espetar la peregrina afirmación de que en Peñuelas el Gobierno del Estado puede materializar cualquier proyecto sin autorización del gobierno municipal y sin importar que se contravengan todos los programas de planeación territorial.Parece ser que un primer capítulo de esta historia se cierra hoy, con la anunciada inasistencia de los secretarios del Gobierno del Estado al Congreso para explicar los detalles del PES. Se trata de una etapa que cierra con un triunfo parcial del gobernador Reynoso, aunque un triunfo desafortunado, que muy a su estilo, atenta contra la democracia, la transparencia, la visión sustentable, la planeación urbana, la solvencia económica del Estado, la calidad de vida de los aguascalentenses. “Voy derecho y no me quito”, suele decir con desvergüenza.

¿El Centro Maussan? ¿Miami?

Ahora la información y la discusión está en Internet

Vale la pena apuntar aquí, casi entre paréntesis, que buena parte de la información y la discusión de relativo nivel se mueve ahora en Internet. Los medios de comunicación locales siguen funcionando casi siempre con boletines y declaraciones incompletas. En la prensa escrita se han publicado cotidianamente notas relacionadas, pero con poca profundidad, teniendo como caso casi excepcional el espacio que hace unos meses ocuparon en Página 24 tres artículos de Oscar López Velarde. El tema de Peñuelas y otros más han encontrado un excelente foro en la web, con un impacto poco masivo pero al alcance de todo el mundo. Se trata de la página de Skyscrapercity, plagada de información interesante sobre ciudades, edificios y obras de todo el orbe, en la cual se forman grupos de discusión. Específicamente, en http://www.skyscrapercity.com/showthread.php?t=586685 puede encontrarse abundante información y comentarios de personas con algún conocimiento o interés en materia de desarrollo urbano que opinan sobre asuntos particulares de Aguascalientes, como el Tren Suburbano o el PES.



Los compromisos ya son muchos, despachos de arquitectos, constructoras, propietarios de terrenos, grandes empresas foráneas, como The Villages, de Florida, dedicada a construir villas para turismo de adultos mayores.


Constitución Política del Estado Libre y Soberano de Aguascalientes
Artículo 27.- Son facultades del Congreso:

Fracción XXX.- Citar a solicitud de las dos terceras partes de sus miembros a los titulares de las dependencias del Poder Ejecutivo y a los de los Organismos descentralizados o de empresas de participación estatal, para que informen sobre el estado que guardan sus respectivas dependencias, cuando se discuta una Ley que sea de su incumbencia o se estudie un negocio relativo a sus actividades”.
* Primera de dos partes. Artículo publicado originalmente en el diario Página 24, en sus ediciones de Aguascalientes y Zacatecas, miércoles 16 de julio de 2008, pp. 26-27.

jueves, 17 de julio de 2008

Proyecto Estratégico Sur. Atractivo pero ilegal y sin beneficio público **

Puntos específicos de por qué no debe promoverse


Desde el punto de vista estrictamente legal, y como lo ha sostenido el experto en la materia, Oscar López Velarde, el proyecto atenta contra todos los instrumentos de planeación urbana vigentes.
Una de las desgracias de Aguascalientes, y a veces del país entero, es que cuenta con una élite económica comodina, poco creativa, distante de la academia y la cultura. Antes que arriesgar su capital en estrategias audaces, de apostar por empresas fuertes y competitivas, prefieren la especulación, la multiplicación, o en el peor de los casos la conservación de fortunas heredadas o construidas a lo largo de más de una generación. Varias familias que encajarían en esta descripción pueden, podrían, estar involucradas en el Proyecto Estratégico Sur, en este plan que con poco esfuerzo, con poca imaginación, con pocos argumentos y con poca ética y sentido del futuro de la sociedad les redituaría en inmensas ganancias.
De realizarse el PES, se promovería en el mediano plazo la conurbación de la ciudad de Aguascalientes con la zona de Peñuelas, generando una mega mancha urbana de enormes dimensiones, algo así como 40,000 hectáreas, es decir, cuatro veces más del perímetro actual de la ciudad. Lo anterior no sería por sí mismo el hecho grave, lo serían sus consecuencias: explosivo incremento demográfico; atentado al equilibrio natural, expresado no sólo en la producción agrícola o en el medio ambiente, sino en la sobreexplotación del recurso hídrico que pondría en riesgo su disposición; segregación social; inseguridad; desarrollo de sectores informales en materia económica y de vivienda; pérdida de identidad; aumento de las ya de por sí grandes distancias entre las familias de mayores ingresos y las de menor acceso a oportunidades. Estamos desde luego, ante un panorama más que preocupante ante el cual debemos expresar y hacer valer nuestro rechazo. No hay que olvidar que a la larga lista anterior se suma un asunto que sí tiene más reflectores: la deuda que ha contraído el Gobierno del Estado en lo que va del sexenio (¡3,000 millones de pesos!) y las voraces intensiones que siguen teniendo. Al final del período actual se tendrá una deuda inmensa que quedará de herencia para muchos años más, que reducirá las posibilidades económicas y de desarrollo para el estado, y que habrá tenido como visibles beneficiarios sólo dos proyectos (Feria Nacional de San Marcos, Peñuelas y anexos) y un puñado de personas.
Quien vea algunas de las fotografías de las maquetas y los planos que han elaborado los despachos arquitectónicos contratados por el Gobierno (al parecer el principal es Gómez Vázquez Aldana y Asociados, de Guadalajara) seguramente se sorprenderá y aprobaría casi sin titubeo su realización como un proyecto de vanguardia. Aunque se trata simplemente de proyecciones que podrían caber en cualquier urbe, sin ningún estilo, sin comprender el carácter de la ciudad en que se insertarían, sin tener otro horizonte que el glamour de Miami, su expresión de “modernidad” impactaría positivamente en mucha gente.
Debe subrayarse, no obstante, que detrás de las maquetas bonitas, impactantes, progresistas, se oculta una realidad que es la que debe ser discutida. Es necesario de entrada que el Gobierno del Estado reconozca la facultad Constitucional para que el Congreso cite a los funcionarios involucrados en el PES, y aún más, es imprescindible que dé a conocer a la opinión pública los detalles del proyecto para que sea analizado al más alto nivel. Tendríamos al menos que tener un estudio serio que nos presente un balance de costos y beneficios que se tendrían. Como recuerdan los politólogos, toda decisión es legítima cuando es discutida por los involucrados, por quienes tienen facultades y posibilidades de aportar argumentos, y cuando se hace evidente que los resultados serán benéficos para la mayoría, no para unos cuantos. Sin ninguna duda, podemos adelantar que estamos ante una decisión totalmente ilegítima.

Alternativas para una ciudad sustentable
¿Qué ciudad queremos? ¿Qué se puede hacer para construirla? ¿Qué acciones están al alcance de cualquier ciudadano para tener una ciudad mejor? En la actual coyuntura, es indispensable tener conciencia de las graves lesiones urbanas y sociales que puede tener el llamado PES. Junto con la explícita oposición a él, debe haber incentivos para que se aprovechen en el corto y mediano plazo las 2 000 hectáreas de lotes baldíos que existen al interior del perímetro urbanizado de la ciudad (20% de la superficie total).
Al común de la sociedad nos quedan acciones como las de irnos sacudiendo la pretensión de estatus y la falsa comodidad de querer trasladarnos a todos lados en automóvil. Hace falta una cultura del uso de la bicicleta y de la caminata.
Una ciudad moderna y sustentable, más cercana a la realidad local y mucho más económica, podría lograrse con esa cultura de la gente del respeto al peatón, al ciclista, al uso de la bicicleta. De igual forma, acciones relativamente simples como reorganizar el sistema de transporte urbano serían altamente benéficas y darían la mejor impresión a los visitantes, esos por los que tanto se preocupan las autoridades. Si el servicio de camiones fuera más limpio y ordenado; si sus rutas estuvieran adaptadas a las necesidades de la ciudad y sus habitantes y no a las de los concesionarios, y si se cumpliera con una señalización adecuada y se fijaran y respetaran frecuencias y tiempos, mucho se habría ganado.


Ciudades vanguardistas.

Tren Suburbano y PES. Un proyecto malo que podría haber sido bueno
La estrategia mediática ha presentado nuevamente un proyecto que ahora se conecta con el PES. Concebido hace ya muchos años desde el Gobierno Federal, el Tren Suburbano tiene detrás de sí abundantes y serios estudios que lo respaldan y lo colocaban como un instrumento oportuno para el desarrollo ordenado del estado. El Tren Suburbano consistiría en un sistema de transporte ágil y moderno que permitiría comunicar en Aguascalientes el norte con el sur, cruzando por el centro del valle. Una red de esta naturaleza contribuye a comunicar polos de desarrollo, poblaciones pequeñas que pueden entrar en relación con las medianas y grandes. Sin embargo, descuidando sus fundamentos un tren suburbano puede provocar una concentración demográfica mayor en la ciudad rectora, ampliando la ya de por sí asfixiante centralización que se padece en muchos niveles en el país, y agravando el desamparo de pueblos y ciudades menores del estado. En buena medida, un tren suburbano terminaría causando un efecto perverso y contrario a sus objetivos: todos los días, miles de usuarios dejarían por la mañana Pabellón de Arteaga, Rincón de Romos o Peñuelas para ir a trabajar a la ciudad de Aguascalientes, una ciudad que les roba sus oportunidades de desarrollo.
El Tren Suburbano relanzado últimamente por el gobernador Luis Armando Reynoso conectaría en su primera etapa, casualmente, la ciudad de Aguascalientes con Peñuelas, en una clara “visión” para sentar precedentes que luego soporten con mayor fuerza al PES. Para muchos campesinos de Peñuelas la noticia ha sido inmejorable, después de todo, no es la salida más decorosa pero sí la menos pesimista ante su situación muchas veces marginal.
Nuevamente, el tren suburbano versión LARF olvidaría que las urbes son centros de administración, que regulan la distribución de bienes y que, no deben ser en ningún caso pulpos que absorban todas las poblaciones que encuentran a su alcance, convirtiendo a los viejos campesinos, o a sus hijos cada vez más desarraigados de su tierra, en obreros mal pagados, albañiles, taxistas, sirvientes en las mansiones de los beneficiarios o, en el peor de los casos, en delincuentes. Un sofisma corriente pretende que si un agricultor de Peñuelas no tiene buenas condiciones de vida las va a remediar al poderse trasladar a la ciudad. Se deben generar oportunidades en los distintos lugares, de acuerdo a su sentido histórico y al horizonte de expectativas que se tengan. Antes que promover o provocar el crecimiento desmedido, centralizado en una ciudad, deben impulsarse polos de desarrollo. Es necesario encontrar y alentar el sentido exacto que tiene una población y el papel que juega y debe jugar en el contexto de la dinámica regional. Se debe buscar la producción en buenas condiciones de los elementos con los que cada comunidad pueda participar en el concierto regional.


Ciudades sin personalidad, ubicadas en maquetas y mentes fuera de la realidad. Entrada a conjunto residencial propuesto, ¿alguien podría explicar de qué se trata la iglesia que aparece del lado izquierdo de la imagen? Imágenes tomadas de:
Ley de Transparencia y acceso a la información pública del Estado de Aguascalientes
Capítulo II
De la Información Pública que debe ser difundida de oficio

Artículo 9º.- Con excepción de la información reservada o confidencial prevista en esta Ley, los sujetos obligados deberán poner a disposición del público y actualizar, cada vez que existan modificaciones a la misma, conforme lo señalen los lineamientos que expida el Instituto, entre otra, la información siguiente:

XXVII.- Información detallada que contengan los planes de desarrollo urbano, ordenamiento territorial y ecológico, los tipos y usos de suelo, licencias de uso y construcción otorgadas por los gobiernos municipales;
XXVIII.- Los estudios de factibilidad ecológica, impacto ambiental, desarrollo urbano y de servicios públicos contratados o elaborados por los sujetos de la presente Ley;
…XXX.- Cualquier otra información que sea de utilidad o se considere relevante, además de la que con base a la información estadística, responda a las preguntas hechas con más frecuencia por el público.
** Segunda y última parte. Artículo publicado en el diario Página 24, en sus ediciones de Aguascalientes y Zacatecas, jueves 17 de julio de 2008, pp. 26-27.

miércoles, 16 de julio de 2008

Novedades vulgares y aburridas

A finales del siglo XVIII, el centro de las artes, la moda, el buen gusto… y la hediondez, era París, la ciudad amada, admirada e imitada por todo el mundo que la maquillaba para no ver sus muchas imperfecciones. Poco tiempo después, muchas urbes de Europa comenzaron a experimentar un intenso proceso de industrialización y crecimiento desmedido. Escritores, artistas e intelectuales fueron especialmente sensibles y críticos a los cambios que ocurrían. En la propia Francia Eugène Sue, Honorato de Balzac, Víctor Hurgo y Baudelaire desconfiaron, lamentaron, denunciaron y ridiculizaron el caos, la confusión, o de plano calificaron más de alguna intervención como “novedades vulgares y aburridas”. Charles Dickens no salía de su asombro al contemplar a su alrededor: “era la mejor de todas las épocas, era el peor de todos los tiempos, era el siglo de la sabiduría, era el siglo de la estupidez… era la estación de la luz, era la estación de las tinieblas”.
Cuando Federico Engels escribía sobre la industrialización y la cadena que de ella se desprendía, tenía en mente ciudades como Manchester, entonces en crecimiento explosivo, con obreros supeditados a pobrísimas condiciones de vivienda, alimentación, vestido y salud en las cuales “se acumula un gran potencial conflictivo”.
A pesar de todo ello, hasta la fecha las ciudades grandes tienen para algunos una especial atracción, aparecen como símbolo de modernidad, de grandeza, de orgullo.
A excepción de Tokio, Nueva York y Los Ángeles, ya desde ahora las ciudades más pobladas están en el tercer mundo: México, Sao Paulo, Bombay, Delhi, Calcuta, Buenos Aires, Jakarta, El Cairo, Manila, Lagos (Nigeria), y pronto, urbes como Johannesburgo y decenas de poblaciones africanas, asiáticas y latinoamericanas desbancarán del no necesariamente honroso ranking de ciudades más habitadas. Ciudades como Rótterdam, Turín, Dublín, etcétera, rondan apenas el millón de habitantes; Munich tiene un poco más; Berlín, Melbourne o San Francisco apenas sobrepasan los tres millones. Las cuatro ciudades que forman la llamada “banana” europea (Frankfurt, Milán, Lyon y Barcelona), todas ciudades de gran tradición, por vocación y por historia grandes centros rectores de la economía, tienen población que oscila entre el 1.5 y los 4 millones de habitantes.Las megaciudades en el siglo XXI, hay que subrayarlo, no serán las urbes desarrolladas, las de primer mundo, serán las ciudades asiáticas, africanas y latinoamericanas, que desde hace muchas décadas han entrado en un proceso de deterioro y crecimiento desorganizado que antes de saberse frenar ha sido incluso promovido las más de las veces irresponsablemente. Industrialización, crecimiento, amplias avenidas y edificios altos no necesariamente llevan aparejado modernidad ni calidad de vida. La modernidad que buscan algunos está en la esencia, no en el símbolo, y la esencia se logra con trabajo, con bases sustentables, con proyectos adecuados y profesionales. El ícono puede obtenerse fácilmente con especulación y con algo de dinero.